La rinoseptoplastia es un procedimiento quirúrgico que se utiliza para corregir la forma de la nariz y además, reubicar el tabique nasal. Esta intervención, por tanto, se realiza por razones estéticas y funcionales.
La nariz es una estructura compleja compuesta de huesos, cartílagos y tejidos blandos, que pueden ser alterados por factores como el envejecimiento, traumatismos o enfermedades. La rinoseptoplastia se realiza para corregir imperfecciones como casos en los que la nariz está torcida, la aparición de la joroba nasal, una punta nasal caída o un tabique nasal desviado, que en muchos casos provocan una obstrucción de las vías respiratorias nasales.
Índice
El procedimiento se realiza bajo anestesia general y puede durar entre dos y cinco horas dependiendo de la complejidad de la operación. La rinoseptoplastia implica una serie de incisiones dentro de la nariz y, en algunos casos, también se hacen incisiones en la columela, la piel que separa las dos fosas nasales. A continuación, se levanta la piel que cubre los huesos y cartílagos de la nariz y se reacomodan para corregir las deformidades.
Después de la rinoseptoplastia, se coloca una férula en la nariz para ayudar a mantener su forma y se colocan tampones en las fosas nasales para detener el sangrado.
La rinoseptoplastia es un procedimiento quirúrgico que se utiliza para corregir deformidades en la nariz y el tabique nasal. Los resultados pueden ser duraderos y los pacientes experimentan una mejor calidad de vida después de la operación.
Después de una rinoseptoplastia, el postoperatorio es crucial para la recuperación del paciente. Es importante seguir cuidadosamente las instrucciones del cirujano, para evitar complicaciones y lograr una recuperación adecuada.
El dolor y la incomodidad son comunes después de la rinoseptoplastia. El médico puede recetar analgésicos para aliviar el dolor, además, los pacientes deben descansar en casa durante al menos una semana después de la cirugía y evitar cualquier actividad deportiva o física durante al menos dos semanas.
La hinchazón y los hematomas son también comunes después de una rinoseptoplastia. La aplicación de compresas frías durante los primeros días después de la cirugía, puede ayudar a reducir las señales visibles. El uso de un humidificador también puede ayudar a reducir la sequedad y la congestión nasal. En algunos casos, el cirujano puede recetar medicamentos específicos para reducir la inflamación.
Durante las primeras semanas después de la cirugía, los pacientes deben dormir con la cabeza elevada y evitar dormir de lado o boca abajo, de esta manera se reduce la hinchazón y la congestión nasal. También se recomienda no respirar o soplar por la nariz durante las primeras semanas después de la cirugía, ya que esto puede aumentar el riesgo de sangrado.
El cuidado de las incisiones es importante después de una rinoseptoplastia. Es importante mantener las incisiones limpias y secas y evitar exponerlas al agua y al sol durante al menos una semana después de la cirugía. El cirujano puede recetar una crema específica para aplicar sobre las incisiones y prevenir infecciones.
Es importante tener en cuenta que el proceso de recuperación puede variar de un paciente a otro. Algunos pacientes pueden experimentar una recuperación visible en pocos días, mientras otras personas necesitan reposo durante al menos dos semanas.
Es preciso recordar que, en general, la rinoseptoplastia es un procedimiento seguro y efectivo que puede mejorar la apariencia y la función de la nariz, pero es importante seguir las instrucciones del médico para garantizar una recuperación exitosa y permanente.
Una de las ventajas de someterse a una intervención de rinoseptoplastia es que los resultados son visibles pocos días después de la intervención. Al tratarse de una intervención correctora, la estructura de la nariz se suaviza, además, se facilita la respiración pasado el proceso postoperatorio.
La rinoplastia y la rinoseptoplastia son dos procedimientos quirúrgicos relacionados con la nariz, pero tienen diferencias significativas.
La rinoplastia es una cirugía plástica que se utiliza para mejorar la apariencia estética de la nariz. Este procedimiento puede reducir o aumentar el tamaño de la nariz, cambiar la forma de la punta o la parte superior de la nariz, suavizar una joroba nasal y corregir otras irregularidades estéticas. La rinoplastia se centra principalmente en la estructura ósea y cartilaginosa de la nariz.
Como hemos visto anteriormente, la rinoseptoplastia es una combinación de una rinoplastia y una septoplastia. La septoplastia se centra en el tabique nasal y se realiza para corregir una desviación del tabique, que puede causar problemas respiratorios. La rinoseptoplastia no solo mejora la apariencia de la nariz sino que también mejora la función respiratoria.
Por tanto, la rinoplastia se enfoca en la apariencia estética de la nariz, mientras que la rinoseptoplastia se centra en la corrección de problemas estéticos y funcionales de la nariz y del tabique nasal. Ambas cirugías son procedimientos quirúrgicos complejos que deben ser realizados por un cirujano plástico altamente capacitado y experimentado.
En la clínica del doctor Aso llevamos a cabo procedimientos quirúrgicos de rinoseptoplastia, con los que no solo variamos la estructura nasal, además buscamos mejorar la función respiratoria mediante la intervención en el tabique nasal. Si quieres solicitar tu primera consulta, contacta con la clínica del doctor Aso y solventaremos tus dudas acerca de la intervención de rinoseptoplastia.